Julio Méndez, un joven de tan solo 16 años, se proclamó el pasado domingo ganador del certamen de novilladas Kilómetro 0. El novillero de Arenas de San Pedro vive junto a su familia en Cáceres y desde allí acude a la Escuela Taurina de Badajoz, donde entrena semanalmente.
Julio siente que es un placer que se le haya otorgado dicho premio de vencedor del certamen por toda la repercusión que ha tenido un certamen que ha contado con la televisión además de sentirse afortunado por ello. En lo personal, se siente feliz.
A pesar de ser alumno de la E.T. Badajoz, saltó la noticia el pasado noviembre de que el maestro Ortega Cano apoderaría a este joven. Esta ha sido su respuesta al respecto: "El maestro me ayuda, se limita a ello y yo hago mucho caso de él. Siempre que alguien que entienda de esto y se fije en ti, ya sea una figura o un simple profesional o aficionado, pues tiene mérito. Estoy orgulloso y con ganas de ver qué sucede esta temporada."
Busca un toreo clásico, puro y con verdad. Como referente tiene a Emilio de Justo, con quien ha compartido que tiene oportunidad de entrenar, y además destaca a José Tomás y al maestro José Miguel Arroyo "Joselito".
En su primera temporada con erales, ha toreado un total de 22 novilladas, cortando 56 orejas y 7 rabos. Además, ha ganado varios certámenes como Navalperal de Pinares, Villamayor de Santiago, las novilladas televisadas de Canal Extremadura, o el premio al mejor novillero de la Comunidad de Madrid. Fue una temporada que describe como de rodaje, en la que disfrutó mucho.
Julio comenzó la temporada a principios de febrero en Ciudad Rodrigo en una novillada donde, tras una gran faena premiada con dos orejas, fue prendido y cogido por el novillo al intentar matarlo. Fue su "bautizo de sangre", y con toda sinceridad, Julio nos dice que quería que llegara, no tanto por él, sino para ver si como decían, "el valor de los toreros se va por el agujero", y si era así, no seguir haciéndole perder el tiempo a los suyos.
Todo lo contrario, nos cuenta Julio que ha salido más reforzado de la jornada, y aunque ha sido dura la preparación para Vista Alegre por el poco tiempo, ha llegado con muchas ganas y la experiencia le ha hecho crecer más como torero, motivándole a seguir, progresar y pasarse el toro más cerca.
Vivió la tarde del sábado como una tarde bonita con un buen novillo, aunque destaca matices que corregir, sobre todo recalca la espada. La segunda tarde la describe como más rotunda y afirma haber visto y tratado de corregir esos "errores de la primera tarde". Cortó una oreja en ambas tardes, proclamándose así campeón del certamen en la final.
Se le presenta una temporada muy completa con dos certámenes muy importantes próximamente, como son El Alfarero de Plata de Villaseca de la Sagra y El Zapato de Plata de Arnedo.
"Son certámenes muy importantes que afronto con ganas y responsabilidad", menciona. En el caso del Zapato, éramos 13 y quedamos 3 en la final. "Estoy muy contento y ya que me ha visto la gente novillero se me exigirá más ahora, aunque lo afronto con muchas ganas".
Julio Méndez sueña con "ser máxima figura, ser feliz y hacer el toreo que a mí me gusta y transmitir a los demás lo que siento. Será lo que más me llene a lo largo de mi carrera y mi vida".